Si algo he entendido en esta vida es que nada es eterno por mucho que nos aferremos a ellos. Ni tan siquiera mi Diván perdurará a mi muerte y aunque asi fuera, ¿para que lo querría yo una vez quemen mi cuerpo? Exacto, la respuesta es Para nada.
Hoy me tumbo de nuevo en el Diván con la única desnudez que mi alma, hoy nadie se deja bragas ni cierra puertas, hoy no se otrogan premios, hoy tampoco se hacen orgias ni se echan a maridos fuera.
Hoy, me siento en diván pensando como quiero que sea mi vida y si algo quiero de verdad es a todos vosotros en ella.
MUCHISIMAS GRACIAS POR VUESTROS COMENTARIOS DE AYER. Apoteósico!
¿Qué es mejor, no saber lo que se quiere o querer demasiado?
ResponderEliminarDicen que la ignorancia es la madre del atrevimiento...
¿y que tomará hoy la señora con ese estado de ánimo? Un riojita y una tapita de paté casero a la truffilla?
ResponderEliminarAngelo, para mi es mejor querer demasiado
ResponderEliminarMaria y me pones unas bravas que yo soy muy normalita
Besotes
Angelo, para mi es mejor querer demasiado
ResponderEliminarMaria y me pones unas bravas que yo soy muy normalita
Besotes
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarPues ya era hora de que te sentaras tu en el Diván, que está siendo muy usado!.
ResponderEliminarBien hecho quetienes un divan muy comodo hazme un ladito.
ResponderEliminarLa estela de después...sólo los vivos la verán, pero de momento, un reposo productivo es fundamental para seguir viviendo.
ResponderEliminarMarta : te sientas tu también?
ResponderEliminarStriper: por supuesto, te dejo un lado.
Conso: precioso comentario, gracias.
Besos a todos
Cristina
pasar por aqui es darme cuenta que existe otro mundo diferente,donde no hay pañales ni mamaderas!!!!jajaBesos
ResponderEliminarPor supuesto, nada es eterno, el cambio hace que las cosas sean transitorias. El problema es que siempre nos aferramos a lo fijo, cuando, en realidad, todo cambiará y no siempre a nuestro gusto. Me encanta tu espacio. Saludos
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